domingo, 18 de octubre de 2015

La historia más triste de toda la Historia




Hoy sábado he vuelto a ceder a la tentación de prestar oídos a una tertulia televisiva, a la que concurren como las acémilas que son, políticos embusteros y periodistas mercenarios; es decir, diversa clase de gentuza.  Su falsedad y estupidez me provocan náuseas, y traen a mi memoria los versos de un poema que sigue siendo actual a pesar del tiempo transcurrido desde que naciera de la pluma del poeta.

DE TODAS LAS HISTORIAS DE LA HISTORIA 

¿Y qué decir de nuestra madre España, 
este país de todos los demonios 
en donde el mal gobierno, la pobreza 
no son, sin más, pobreza y mal gobierno 
sino un estado místico del hombre, 
la absolución final de nuestra historia?  

De todas las historias de la Historia  
sin duda la más triste es la de España,
porque termina mal. Como si el hombre,
harto ya de luchar con sus demonios,
decidiese encargarles el gobierno
y la administración de su pobreza.

Nuestra famosa inmemorial pobreza,
cuyo origen se pierde en las historias
que dicen que no es culpa del gobierno
sino terrible maldición de España,
triste precio pagado a los demonios
con hambre y con trabajo de sus hombres.

A menudo he pensado en esos hombres,
a menudo he pensado en la pobreza
de este país de todos los demonios.
Y a menudo he pensado en otra historia
distinta y menos simple, en otra España
en donde sí que importa un mal gobierno.

Quiero creer que nuestro mal gobierno
es un vulgar negocio de los hombres
y no una metafísica, que España
debe y puede salir de la pobreza,
que es tiempo aún para cambiar su historia
antes que se la lleven los demonios.

Porque quiero creer que no hay demonios.
Son hombres los que pagan al gobierno,
los empresarios de la falsa historia,
son hombres quienes han vendido al hombre,
los que le han convertido a la pobreza
y secuestrado la salud de España.

Pido que España expulse a esos demonios.
Que la pobreza suba hasta el gobierno.
Que sea el hombre el dueño de su historia. 

Jaime Gil de Biedma


 Para escuchar: "España camisa blanca".
Letra versionando un poema de Blas de Otero interpretado por Ana Belén.

España camisa blanca

España camisa blanca de mi esperanza
reseca historia que nos abraza
por acercarse sólo a mirarla.
Paloma buscando cielos más estrellados
donde entendernos sin destrozarnos
donde sentarnos y conversar.

España camisa blanca de mi esperanza 
a veces madre y siempre madrastra,
navaja, barro, clavel, espada; 
la muerte siempre presente nos acompaña
en nuestras cosas más cotidianas
y al fin nos hace a todos igual.

[España camisa blanca de mi esperanza
la negra pena nos amenaza
la pena deja plomo en las alas.
Quisiera poner el hombro y pongo palabras
que casi siempre acaban en nada
cuando se enfrentan al ancho mar.

En el original del poeta]

España camisa blanca de mi esperanza
a veces madre y siempre madastra;
navaja, barro, clavel, espada.
Nos haces siempre a tu imagen y semejanza
lo bueno y malo que hay en tu estampa
de peregrina a ningún lugar.

España camisa blanca de mi esperanza
de fuera a adentro, dulce o amarga
de olor a incienso, de cal y caña.
Quien puso el desasosiego en nuestras entrañas
nos hizo libres pero sin alas
nos dejos el hambre y se llevó el pan.

España camisa blanca de mi esperanza
aquí me tienes nadie me manda
quererte tanto me cuesta nada.
Nos haces siempre a tu imagen y semejanza
lo bueno y malo que hay en tu estampa
de peregrina a ningún lugar.
 

Jaime Gil de Biedma (Barcelona, 13 de noviembre de 1929 - Barcelona, 8 de enero de 1990) fue un poeta español, uno de los autores más importantes de la Generación del 50. De familia burguesa acomodada, era la clásica oveja negra de familia aristocrática. Sintió en sus carnes el desprecio por su confesada homosexualidad, y toda su vida fue un debate intelectual entre su educación burguesa y sus convicciones. Admirador de Buadelaire y Sartre, y sobre todo de Cernuda, su poesía estuvo atravesada por un profundo pesimismo y un alto contenido político. Su vida interior queda por completo marcada por su condición sexual, circunstancia que, en el seno de su profundo pesimismo, le llevó a vivir al límite toda una serie de experiencias íntimas autodestructivas.

2 comentarios:

  1. Comparto esta visión negra pero esperanzada (en el fondo) de mi admirado poeta y casual tío materno de esa otra Esperanza (zafia , corruPPta y desesperante) y su permanente actualidad , posiblemente producto de su genio poético . Y qué fondo musical más adecuado que el poema de Blas de Otero en voz de Ana Belén (gran intérprete y peor persona) ....
    A mi también me duele mucho España (y eso que nací en Kiev - o , a lo mejor , por eso .......)
    Me encanta tu blog !!!!

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  2. Muchas gracias Eduardo por tu comentario. Siento que somos muchos los que tratamos de ser personas decentes, en un país en donde la cabeza se usa más para embestir que para pensar, como decía Antonio Machado. Vivimos como podemos, y nos dejan, saliendo adelante entre días buenos y malos. Y eso nos convierte muchas veces en héroes, pero en héroes cansados.

    Espero que en el futuro sigas volviendo por el blog.

    Un saludo.

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