jueves, 30 de mayo de 2013

El camino del infierno


En alguna ocasión anterior escribí que la vida es una sucesión de días grises que pasán ante nosotros camino del olvido. Cada mañana nos levantamos decididos a ocuparmos de tantas cosas "importantes" como tenemos pendientes. Nos aguardan los proyectos atrasados y las llamadas sin devolver. Los trabajos por entregar se acumulan y los correos sin abrir nos reclaman exigentes en la bandeja de entrada. 

A una hora cualquiera suena el teléfono y... de golpe la vida te conduce al borde del precipicio. Nunca estás preparado para asumir la posibilidad de despedir a un hijo, y cuando se pasa de la mera posibilidad teórica a la probabilidad matemática... se abre ante ti una sima oscura e insondable. 

Puede que seas capaz de no mover un sólo músculo de tu cara, y que te muestres frío y entero. Pero durante esas horas en las que esperas con ansiedad que un desconocido vestido de verde te diga si en su mesa de trabajo te han extirpado el alma, si tu vida ha dejado de tener sentido, la noria de los recuerdos gira incesante en tu mente, y la montaña rusa de un circuito grotesco recorre a toda velocidad tu corazón en un recorrido sin final. Cruelmente, el destino de todo cuanto tienes de verdad, de todo cuanto te queda en tu existir de inocencia prestada, se decide en la tómbola absurda de esa feria que llamamos vida.

Y así, en el silencio y la penumbra de un pasillo en la madrugada, descubres que el camino del infierno está cubierto de baldosas brillantes, iluminadas por la luz blanca y titilante de un fluorescente lejano.

Para escuchar: "Sus ojos se cerraron" de Carlos Gardel  
Letra de Carlos Gardel. Música de Alfredo Le Pera. Compuesto en 1935

LETRA

 Sus ojos se cerraron
y el mundo sigue andando,
su boca que era mía
ya no me besa más.
Se apagaron los ecos
de su reír sonoro
y es cruel este silencio
que me hace tanto mal...

 

 Fue mía la piadosa
dulzura de sus manos,
que dieron a mis penas
caricias de bondad,
y ahora que la evoco
hundido en mi quebranto,
las lágrimas trenzadas
se niegan a brotar,
y no tengo el consuelo
de poder llorar...


¿Por qué sus alas tan cruel quemó la vida?
¿Por qué esa mueca siniestra de la suerte...?
Quise abrigarla y más pudo la muerte,
como me duele y se ahonda mi herida.

Yo sé que ahora vendrán caras extrañas
con su limosna de alivio a mi tormento.
Todo es mentira, mentira es el lamento...
¡Hoy esta solo mi corazón!
.

Como perros de presa
las penas traicioneras
celando su cariño
galopaban detrás,
y escondida en las aguas
de su mirada buena
la muerte agazapada
marcaba su compás.


En vano yo alentaba
febril una esperanza
clavo en mi carne viva
sus garras el dolor,
y mientras en la calle
en loca algarabía
el carnaval del mundo
gozaba y se reía
burlándose el destino
me robó su amor...


 ¿Por qué sus alas tan cruel quemó la vida?
¿Por qué esa mueca siniestra de la suerte...?
Quise abrigarla y más pudo la muerte,
como me duele y se ahonda mi herida.

Yo sé que ahora vendrán caras extrañas
con su limosna de alivio a mi tormento.
Todo es mentira, mentira es el lamento...
¡Hoy esta solo mi corazón!
.



Carlos Gardel fue un cantante, compositor y actor de cine naturalizado argentino, el más importante en la historia del tango. Gardel realizó 957 grabaciones, cubriendo 792 temas diferentes. Rodó diez películas. falleció el 24 de Junio de 1935, y cada día cnata mejor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario